Ciertamente es bien difícil dejar marchar a TU sumisa a descubrirse, y quedar el fin de semana posterior a su primera sesión como Dominante para mirarla a los ojos, y encontrar en ellos un revoltijo de sensaciones, dudas, un embrollo de sentires, y buscar el cabo, e ir deshaciendo el embrollo, el lío, y deshaciendo los nudos, ese camino andado a solas y que la ha separado de ti. No el que la ha hecho crecer, sino el que la ha hecho dudar, desesperarse, pensar que ella no tiene cabida en el BDSM porqué ella no es sumisa.
Parece mentira que haya tardado tanto en descubrir lo obvio. Ella no es sumisa.
Claro qué...
Si no es sumisa, ¿por qué lleva collar?
Si no es sumisa, ¿por qué tiene Amo?
Si no es sumisa, ¿por qué disfruta entre mis manos cuándo la trato como a MI perra?
Si no es sumisa, ¿por qué disfruta de cada azote, de cada uso de su sádico Dueño?
Si no es sumisa, ¿por qué se siente tan perra?
Han sido tres días raros, la sumisa que no es sumisa y su Amo se han reencontrado, se han mirado a los ojos, se han sentido, y se han despedido, Él llevaba una sonrisa en la mirada, ella las nalgas amoratadas, la espalda marcada, los muslos ardiendo, el sexo inundado, las ganas de más, puestas; también llevaba algo más, una promesa que se hará realidad cuándo el cuerpo que lleva de un lugar a otro pero que no es suyo, si no de Él, no tenga una sola marca.
Volverán a encontrarse, Amo y sumisa, y esa vez, el morado será completo, en todos los sentidos.
Hasta entonces Amo y sumisa no se verán, hasta entonces la sumisa no será usada.
Y mientras tanto...
¿Qué hará la Dominante?
Pues esa, es otra historia, y deberá ser contada por otra persona, no le corresponde a este Amo hablar de lo que no es SUYO.
¿Un galimatías?
Para nada, es cuestión de tener las cosas pero que muy claras.
Un saludo
Amo Karl H
Parece mentira que haya tardado tanto en descubrir lo obvio. Ella no es sumisa.
Claro qué...
Si no es sumisa, ¿por qué lleva collar?
Si no es sumisa, ¿por qué tiene Amo?
Si no es sumisa, ¿por qué disfruta entre mis manos cuándo la trato como a MI perra?
Si no es sumisa, ¿por qué disfruta de cada azote, de cada uso de su sádico Dueño?
Si no es sumisa, ¿por qué se siente tan perra?
Han sido tres días raros, la sumisa que no es sumisa y su Amo se han reencontrado, se han mirado a los ojos, se han sentido, y se han despedido, Él llevaba una sonrisa en la mirada, ella las nalgas amoratadas, la espalda marcada, los muslos ardiendo, el sexo inundado, las ganas de más, puestas; también llevaba algo más, una promesa que se hará realidad cuándo el cuerpo que lleva de un lugar a otro pero que no es suyo, si no de Él, no tenga una sola marca.
Volverán a encontrarse, Amo y sumisa, y esa vez, el morado será completo, en todos los sentidos.
Hasta entonces Amo y sumisa no se verán, hasta entonces la sumisa no será usada.
Y mientras tanto...
¿Qué hará la Dominante?
Pues esa, es otra historia, y deberá ser contada por otra persona, no le corresponde a este Amo hablar de lo que no es SUYO.
¿Un galimatías?
Para nada, es cuestión de tener las cosas pero que muy claras.
Un saludo
Amo Karl H
1 comentario:
esas preguntas pasan por mi cabeza a la velocidad de la luz a todas horas, y se manifiestan cuándo estoy a su lado, entonces, lo que está oculto, ladeado, llevado al último rincon, pasa a estar en primer plano, las dudas crecen y la mayoría de las veces dejo que dominen mis pensamientos, en lugar de símplemente sentir, menos mal que eso es sólo a veces, otras me dejo llevar con la boca abierta y una expresión de sorpresa e incertidumbre que me delata
Un beso
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